Nos encontramos en un club de jazz, desierto pero con unas vistas impresionantes. Dice que este es mi escondite pero no, es la primera vez que caigo por aquí. Nos sentamos y nos ponemos cómodos en el sofá. El me mira, le sonrío, repaso con disimulo su cuerpo descansado. Noto como su mano me acaricia el muslo, y le dejo que recorra mi pierna mirándolo con un gesto provocador. Sus palabras al oido hacen que sin querer meta mi mano dentro de su chaqueta y repase con la yema de mis dedos su potente anatomía.
Estamos en un sitio público y como sigas no voy a poder salir de aquí guardando la compostura. – dice con su sonrisa de niño travieso.
Pues vamonos, antes que me ponga encima de ti y perdamos los papeles. – le digo mientras juego con su pelo.
Como él, igual que yo, es un okupa, aparecemos en una casa que sin duda la ha asaltado más de una vez pues se mueve como pez en el agua.
Piano o cama? –al grano pienso yo.
Elije tú. -(Que no diga piano por Dios).
Sus manos empiezan a perderse por todo mi cuerpo, mientras con su lengua explora todos los poros de mi piel. Sabe que me va a hacer sufrir, yo lo dejo.. ya sufrirá él.
Envuelta en un aroma de lujuria, diviso a mis espaldas a un tipo… que mira atónito desde detrás de la pared del dormitorio.
Allí hay un tipo- le digo.
Donde? – me contesta despreocupado.
Detrás de tu esplendido culo, espera.. que me esta diciendo algo. Por Dios Pit, donde me has traído? – le pregunto a ver que se le ocurre.
Na, tú pasa de él – y se queda tan ancho.
A lo que el invasor comienza a decirme:
Hola preciosa! Te gusta mi cama?
…….
Te gusta mi cama? – que sí que te he leído, sólo que me estoy haciendo la loca.
Hola! – le contesto.
De donde eres? – anda mira si tiene ganas de charla. Estas mentes calenturientas todavía me sorprenden.
Perdona, no sabía que era tu cama. Ni tú casa. Ya nos vamos. Perdón. – le contesto como si le estuviera mandando un telegrama. Soy morbosa pero no tanto..
Vale, cuando tengas tiempo me gustaría enseñártela toda. Tiene sitios escondidos mas placenteros que la cama en la que estas. – Mientras me dice esto, me ofrece amistad.
Ah y bonitos senos.
Me habían dicho cosas pero lo de bonitos senos me llegó al alma y no pude parar de reir.
No le conteste, seguí con mi revolcón en otro lugar. Jugamos con nuestros cuerpos más excitados si cabe por la visita invasora y al terminar Pit en vez de abrazarme o decirme lo maravilloso que ha sido, me dice:
Que raro que no nos haya baneado.
Rarísimo, aunque creo que le ha gustado por que otra explicación no tiene. – Le digo así con toda la naturalidad del mundo.
Aunque cariño, la próxima vez que me lleves a un sitio así, no respondo de mis actos.
Estamos en un sitio público y como sigas no voy a poder salir de aquí guardando la compostura. – dice con su sonrisa de niño travieso.
Pues vamonos, antes que me ponga encima de ti y perdamos los papeles. – le digo mientras juego con su pelo.
Como él, igual que yo, es un okupa, aparecemos en una casa que sin duda la ha asaltado más de una vez pues se mueve como pez en el agua.
Piano o cama? –al grano pienso yo.
Elije tú. -(Que no diga piano por Dios).
Sus manos empiezan a perderse por todo mi cuerpo, mientras con su lengua explora todos los poros de mi piel. Sabe que me va a hacer sufrir, yo lo dejo.. ya sufrirá él.
Envuelta en un aroma de lujuria, diviso a mis espaldas a un tipo… que mira atónito desde detrás de la pared del dormitorio.
Allí hay un tipo- le digo.
Donde? – me contesta despreocupado.
Detrás de tu esplendido culo, espera.. que me esta diciendo algo. Por Dios Pit, donde me has traído? – le pregunto a ver que se le ocurre.
Na, tú pasa de él – y se queda tan ancho.
A lo que el invasor comienza a decirme:
Hola preciosa! Te gusta mi cama?
…….
Te gusta mi cama? – que sí que te he leído, sólo que me estoy haciendo la loca.
Hola! – le contesto.
De donde eres? – anda mira si tiene ganas de charla. Estas mentes calenturientas todavía me sorprenden.
Perdona, no sabía que era tu cama. Ni tú casa. Ya nos vamos. Perdón. – le contesto como si le estuviera mandando un telegrama. Soy morbosa pero no tanto..
Vale, cuando tengas tiempo me gustaría enseñártela toda. Tiene sitios escondidos mas placenteros que la cama en la que estas. – Mientras me dice esto, me ofrece amistad.
Ah y bonitos senos.
Me habían dicho cosas pero lo de bonitos senos me llegó al alma y no pude parar de reir.
No le conteste, seguí con mi revolcón en otro lugar. Jugamos con nuestros cuerpos más excitados si cabe por la visita invasora y al terminar Pit en vez de abrazarme o decirme lo maravilloso que ha sido, me dice:
Que raro que no nos haya baneado.
Rarísimo, aunque creo que le ha gustado por que otra explicación no tiene. – Le digo así con toda la naturalidad del mundo.
Aunque cariño, la próxima vez que me lleves a un sitio así, no respondo de mis actos.
13 comentarios:
Vaya, vaya, ya podria haber aparecido el dueño del piso en otro momento!! jajajja
Besotes!!
No nos mires! únete!
no nos mires! únete!
;)
Juer a mi me paso algo relativamente parecido. En pleno calenton con una clienta en mi antigua casa, aparecio el marido con el que habia estado de charleta horas antes. Fue de lo más peregrino.
Jaja.. tocaya.. eso mismo pensé yo! El momento en el que creía que nos iba a banear, fue por decirlo de alguna manera, excitante pero se apiadó de nosotros.
Besitos guapa!
Hugo cielo, si hubieses sido tú el invasor otro gallo cantaría....;)
elgob, te acuestas con las clientas?? juasss.
buu que cochinaaa
le dijo la sartén al cazo...
Jur... mientras no se hubiera puesto él a manipular la cama de bolas como me paso a mi una vez con un voyeur ..por supuesto en este caso..le baneamos...juas juas...
Yo no me acuesto con las clientas, esa es la jodia clave de mi inexistente vida amorosa en SL. TODAS LAS KEKAS SON CLIENTAS. Pero los calentones bestiales, sobrealimentados e irrefrenables pues es eso que cuesta trabajo contenerse. Ahora que no me vulve a pasar.
Mmm... desconozco si otro gallo se habría arrancado por soleares, pero te garantizo que al menos lo de "bonitos senos" te lo habrías ahorrado. De tener que decir algo así, me habría decantado, sin duda, por un "bonitos pezones". Es más fino, pero menos engolado.
Y ésta África es la misma África que...? Ah... entiendo, entiendo. ;)
Ayyy aleix..eso si que es un marrón que te toquen las bolas en pleno juego..
elgob, siento haberte ofendido. Tú eres un profesional y ni tan siquiera das besos de despedida al finalizar tu trabajo.
Hugo, esa frase también suscitaría en mi una risita pero más risueña, más.. stop! stop! que me pierdo!.
Y si, es ella, África la misma que viste y calza. Gracias a ella, a veces, soy como una veinteañera!
;)
Otias, siento haber dado la impresion de ofendido, lo siento no era mi intendion. Ahora me doy cuenta que no puse ningun signo de afectividad.
Lo siento
Sisi, yo misma, já! XD
Traidora! ¬¬
Publicar un comentario